Hilos Tensores
RESULTADO
Resultados inmediatos
TIEMPO
30 minutos
DURACIÓN
Hasta 24 meses
ANESTESIA
Anestesia local
Los hilos tensores son una excelente alternativa para pieles que presentan flacidez, que están caídas e incluso para disimular arrugas, ya que su finalidad es tensar la piel del rostro, devolviéndoles así su aspecto rejuvenecido y terso. Ofrecen resultados muy eficaces sin tener que pasar por cirugías ni molestos tiempos de recuperación.
Los hilos están hechos de un material reabsorbible y, de larga duración.
Otro de los grandes beneficios además de su efecto tensor, es que al mismo tiempo también estimulan la propia producción de colágeno de nuestro organismo, la cual con el paso del tiempo va disminuyendo y es lo que da lugar a la aparición de arrugas y signos prematuros de envejecimiento.
¿En qué consiste?
Es un tratamiento que generalmente se realiza en dos fases y utiliza:
Hilos monofilamentos: Es una técnica que consiste en colocar múltiples hilos tensores monofilamento en posiciones estratégicas para crear una red que actúa como soporte de los tejidos.
Es mínimamente doloroso, usando crema anestésica tópica.
El procedimiento es de duración corta, dependiendo de las necesidades de cada paciente y, es usado comúnmente en la papada, arrugas del cuello, surcos nasogenianos, patas de gallo y perfil mandibular.
Hilos espiculados: Los hilos tensores espiculados es un tratamiento mínimamente invasivo que favorece la interconexión de las células y sirve como canal de unión para potenciar la producción de fibras elásticas.
Por tanto, gracias a la mejora en los niveles de colágeno y elastina se contrarresta la flacidez facial y los signos de expresión del rostro.
Se insertan bajo la dermis mediante una cánula muy fina, por lo cual es un tratamiento muy poco invasivo y el paciente no siente dolor.
Los resultados son mucho más naturales que en el lifting facial. Los resultados se ven inmediatamente, quedando el hilo invisible a la vista.
El resultado es una piel más tersa, sin flacidez y más rejuvenecida.
Los efectos duran entre 12 y 24 meses.
Por último, es habitual notar cierta inflamación postratamiento. Por ello, es recomendable aplicar frío local durante las primeras 24 – 48 horas y evitar todo lo posible la sudoración.